Ahorro energético: las etiquetas de la energía

Si realizamos un repaso por todas las actividades que realizamos a lo largo de un día seremos conscientes de que la energía eléctrica está presente en la mayoría de ellas. De ahí la importancia de que seamos conscientes de distintos aspectos a tener en cuenta sobre el consumo de la electricidad. Por un lado, algunas fuentes de energía se agotan, es decir, existen de forma limitada en la naturaleza por lo que se consideran no renovables. Además, el modo de transportar, extraer y consumir esta energía también tiene su impacto en el medioambiente.

Por estos motivos es importante ser conscientes de la importancia de realizar un consumo responsable de la energía, fomentando el ahorro energético para contribuir a conservar el medioambiente y el desarrollo sostenible.

Ahorro energético: las etiquetas de la energía

 

A la hora de renovar los electrodomésticos de nuestro hogar, es muy importante que tengamos en cuenta sus características energéticas, ya que no todos consumen lo mismo. Para identificar esto de una manera sencilla, se creó la etiqueta energética que indica el consumo de energía de los electrodomésticos. Su utilización es obligatoria desde el año 1995 según la normativa de la Unión Europea (Directiva 95/12).

En la etiqueta energética se muestran los niveles de consumo de energía de los aparatos mediante una letra que va desde la A (color verde) hasta la G (color rojo), estableciendo siete niveles. En la actualidad, cuando la mayoría de los aparatos de un determinado tipo llega a la clase A, pueden añadirse a la escala hasta tres clases adicionales: A+, A++ y A+++. A partir de 2021 estas escalas adicionales se eliminarán progresivamente en frigoríficos, lavavajillas, lavadores, televisores y lámparas debido a la confusión que generan al haber mejorado considerablemente la eficiencia energética de estos productos.

En cuanto a las diferencias entre los distintos niveles, debemos tener en cuenta que un electrodoméstico de clase A+++, por ejemplo, consume un 22% menos de lo que consume uno de tipo medio.

Esta medida se estableció para fomentar el ahorro de energía y el desarrollo sostenible