Ya tenemos a la vuelta de la esquina los días más fríos del año. Tanto el gas, como el gasóleo y la electricidad suben descontroladamente, e incluso los bio-combustibles suben simplemente porque el transporte de los mismos se encarece. Aún estás a tiempo de comenzar una reforma en tu casa y comenzar a ahorrar euros en tu factura de la luz. ¿Cómo? Con un buen aislante térmico que te ayude a mantener tu casa caliente los días de más frío y fresca en los días más calurosos de verano. ¿Quieres saber cómo? ¡Sigue leyendo!
Aislante térmico en los días de frío
Los muros o paredes del edificio son los siguientes causantes de que el calor no sea perceptible en nuestro hogar. Por aquí se escapa el 25% de la temperatura de las viviendas. Y, por ello, deberían ser objeto de la rehabilitación o reforma térmica para que ésta sea completa. En este caso, al igual que con el techo, reduciendo la pérdida de calor por las paredes también se abarata el importe de la factura eléctrica o gas.
En este punto, la rehabilitación térmica de los muros se puede hacer desde el interior de la vivienda o desde el exterior, ya que se trata de abrigar “la piel del edificio”. Si bien es más efectiva si se hace desde el exterior, muchas veces no es viable ya que hay que ponerse de acuerdo con el resto de vecinos para aislar la fachada. Por ello muchas veces es aconsejable aislar desde el interior, ya que es más sencillo y, también, económico, pues se detectan las necesidades específicas de la vivienda y se aíslan todos los puntos críticos para no perder el calor generado. Existen muchos materiales aislantes para el interior de la vivienda, que además suelen tener propiedades acústicas, evitando de igual modo la propagación del ruido de un piso a otro o incluso disminuir el ruido del exterior.
Desde Fenelux recomendamos siempre utilizar aislantes térmicos de calidad. Nosotros siempre nos decantamos por Aerotherm. Un aislante muy fiable que te ayudará a ahorrar significativamente en tu factura de la luz.