No hay nada tan importante como tu seguridad y la de los tuyos. Saber que tu casa es tan fiable como acogedora es esencial para disfrutarla al máximo: las puertas de seguridad te ofrecen ese plus que necesitas para tu tranquilidad. Descubre qué debes tener en cuenta a la hora de elegir la mejor.
Vacaciones, fines de semana, viajes familiares o por trabajo… Estar tranquilos cuando estamos fuera, sabiendo que nuestra casa está a salvo de intrusos, hará mucho más agradables nuestros días de descanso. Y aún más importante es poder disfrutar de nuestro hogar sin miedo a los intrusos. Si tenemos en cuenta que en la mayoría de los casos los ladrones acceden por la entrada, merece la pena reforzarla con una buena puerta de seguridad. Si a tuya tiene ya unos cuantos años o no estás seguro de su resistencia, tal vez te merezca la pena valorar cambiarla por un modelo con mayores prestaciones. Descubre qué ventajas ofrecen las puertas de seguridad, qué debes valorar a la hora de elegirlas y por qué constituyen la mejor inversión para tu tranquilidad. ¿Quieres saber cómo elegir tu puerta de casa ? ¡Sigue leyendo!
Como elegir tu puerta: Tips que debes tener en cuenta
En la mayor parte de los casos los robos no son planificados, sino que obedecen a la oportunidad. ¿Qué significa esto? Pues que si se dan ciertas condiciones (la casa está vacía, no hay vigilancia, la calle está desierta, la puerta parece fácil de forzar…), los delincuentes profesionales pueden intentar forzar una puerta. Las claves para saber si la tuya tiene posibilidades para ser atacada son:
Tipo de vivienda. Hay más robos en viviendas unifamiliares y aisladas que en edificios de pisos. En estos últimos es más probable que los ladrones intenten entrar en casas con pocos vecinos por descansillo, portales que dan directamente a la calle y en edificios sin portería ni conserje.
Tiempo de forzado. Es un factor clave. Con tiempo suficiente y medios adecuados, todas las puertas se pueden forzar. Las puertas más seguras se tardan más en abrir, necesitan herramientas especializadas y se hace más ruido. Frente a una puerta de este estilo, lo normal es que los intrusos desistan de su intento.
Ocupación de la vivienda. Las casas de vacaciones y segundas residencias son más fáciles de robar, porque permanecen vacías durante mucho tiempo. Además, suelen estar situadas en zonas que en las que solo hay gente durante las vacaciones o los fines de semana (urbanizaciones en la costa, el campo…). También hay casas rurales o de montaña que se encuentran aisladas durante todo el año.
Siempre es importante tener en cuenta el tipo de vivienda a la hora de elegir una puerta de entrada. Si por ejemplo vives en un edificio céntrico con portal exterior, conserjería y vigilancia 24 horas, puedes optar por un modelo con menor grado de seguridad que si se trata de una casa con un solo portal, sin conserjería o unifamiliar.